3 de junio de 2009


Y entonces te reíste del mundo, te reiste de quien te quiso ver tropezar, de quien lo intento con saña, incluso hasta del que lo consiguió. Te reiste de la envidia y de las trabas, de la inconsciencia, de la codicia y del engaño hasta casi compadecerte. No estrechaste aquella mano por no sentirte iluso, y porque era más sano protegerse de lo que causa mucho frío, pero casi hasta olvidaste. Olvidaste que la mezquindad solo habita en los corazones de los que lo sienten, y que les atrae casi de inmediato hacia quienes brillan, como el mosquito a la luz.

Pero aprendiste que nada puede hacer tambalear un cimiento firme, algo construido sobre muros de verdad y de buena intención porque lo que es invisible a los ojos tarde o temprano acaba saliendo por algún otro lado, y cada cosa se pone en el sitio que le corresponde; en un lugar que determina la vida que estás llevando, lo que eres y lo que vas a ser. Y solo en la soledad de tu almohada, cuando callan las palabras y nadie escucha, cuando se encuentra ante su verdad, es cuando uno sabe realmente cuan grande o pequeña es su dicha

5 comentarios:

  1. De los errores se aprende no? siempre hay que sacar el lado positivo de todas las situaciones tanto de las buenas como de las malas...
    y nadie mejor que uno mismo para ser autocrítico :)

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  2. 'Y solo en la soledad de tu almohada, cuando callan las palabras y nadie escucha, cuando se encuentra ante su verdad, es cuando uno sabe realmente cuan grande o pequeña es su dicha.'
    Totalmente de acuerdo pequeño Denny Sucko, o como dice el refranero popular: 'A cada cerdo le llega su San Martín' que me he levantado yo hoy así como tradicional.

    N

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  3. Eres una persona genial ..

    no dejo de admirarte por como escribes ..

    un besazo enorme guapisimo

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  4. perdona que soy sansia/amaia la de arriba..

    cuidate y feliz finde semana

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